Cuando le hablan de Uruguay a cualquier extranjero, lo primero en lo que piensa, seguramente, sea en Montevideo. La capital se ha convertido en una de las ciudades más prósperas de toda América del Sur, y su crecimiento parece imparable. Sin embargo, hay otras ciudades interesantes en Uruguay, especialmente para los turistas. Ahí está Salto, o también Maldonado, por no hablar de la popular Punta del Este. En los últimos años, sin embargo, los turistas están focalizando también su interés en una de las joyas más escondidas del país. Se trata de Colonia de Sacramento, una preciosa ciudad ubicada en el suroeste del país, con playas, un centro histórico precioso, y un ambiente muy especial. Esta antigua colonia portuguesa ha tenido una historia bastante tumultuosa, pero hoy por hoy es uno de los sitios más buscados por los turistas en nuestro país.
Los uruguayos conocen de sobra las bondades de este destino platense, que durante muchos años se convirtió en el primer contacto entre Uruguay y Argentina. Su cercanía a Buenos Aires ha permitido también que muchos turistas que están en la capital argentina den el salto para conocer esta joya colonial uruguaya. De hecho, la importancia histórica del lugar es tal que fue el primer asentamiento en lo que hoy conocemos como Uruguay. Los portugueses decidieron ubicar aquí una pequeña ciudad para aprovechar el comercio con Buenos Aires, a través del Río de Plata. La ciudad ha pasado por muchas fases desde entonces. Ocupaciones, independencia y décadas de abandono. Por fortuna, en los últimos años se han llevado a cabo diferentes reformas y reconstrucciones para convertir a Colonia de Sacramento en un destino increíble. Pasear por su centro histórico, por las calles empedradas y tranquilas de la ciudad, es todo un lujo. Conocer los lugares más importantes de la ciudad, que además están muy cerca unos de otros, está al alcance de cualquier turista. Aquí vamos a dejar los que son absolutamente imperdibles.
Calle de los suspiros
No es de extrañar que el Centro Histórico de Colonia de Sacramento fuese decretado en 1995 como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. La belleza colonial de sus calles invita a pasear por ellas de manera sosegada, paladeando cada instante, cada paso, y disfrutando de un lugar tan especial. De entre vías del centro destaca la célebre Calle de los Suspiros, con su empedrado y su cuesta hacia el Río de la Plata. La calle fue construida a semejanza de las angostas calles portuguesas, y hoy por hoy es toda una delicia pasear por aquí. La calle nace de la Plaza Mayor, así que es muy fácil de encontrar. Como curiosidad, su precioso nombre tiene un origen no apto para todos los públicos. Y es que se dice que la calle se llama así por los suspiros que los marineros dedicaban al ver a las prostitutas de la zona…
Ruinas del convento San Francisco
El convento de San Francisco fue uno de los primeros en levantarse en esta ciudad, a finales del siglo XVII. Por desgracia, al poco tiempo de estrenarse, un gran incendio acabó prácticamente con todo el convento. Lo que queda hoy son unas ruinas, aun así interesantes, justo al lado del Faro, otro de los destinos imperdibles en la ciudad, como veremos ahora. Pasear por estas ruinas antes de acercarnos al puerto a la plaza mayor de la ciudad puede servirnos para coger fuerzas, para disfrutar de un rato de tranquilidad. Actualmente, el templo más importante de la ciudad es la Basílica del Santísimo Sacramento, bastante sobria, pero que es considerada la más antigua de Uruguay. El templo en sí es del siglo XIX, pero se levanta sobre la primera iglesia edificada en la ciudad, con el mismo nombre.
Faro
Uno de los lugares que no podemos perdernos en nuestra visita a Colonia de Sacramento es el imponente Faro, una torre construida justo al lado de las ruinas que hemos visitado anteriormente. El Faro no tiene una altura excesiva, pero sí la suficiente para poder atisbar, desde lo alto, toda la ciudad, así como la desembocadura del Río de Plata y, en un día bueno, incluso Buenos Aires al otro lado. Son casi 200 escalones los que hay que subir para contemplar esta estampa. Sin embargo, vale mucho la pena hacerlo porque las vistas desde este punto son impagables, y el esfuerzo valdrá la pena. El edificio es del siglo XIX y se conserva en perfecto estado, tanto es así que de hecho sigue funcionando como faro para los barcos que pasan por el río.
Bastión del Carmen
Si el Faro nos da una de las mejores perspectivas de la ciudad, por su altitud y la posibilidad de verlo todo en 360º, los mejores atardeceres de la ciudad se ven desde el Bastión del Carmen. Un lugar que además cuenta con un montón de edificios coloniales muy bien conservados, y que son una auténtica maravilla para visitar. El Bastión del Carmen nos da ya una visión del Río de la Plata y de su importancia en la historia de la ciudad. Además, cuenta con muchos comercios cercanos, donde encontrar tanto restaurantes tradicionales como tiendas de recuerdos. Un lugar imperdible si decidimos acercarnos a Colonia de Sacramento.
Casa del Gobernador
Cuando a un turista le explican que uno de los puntos más importantes de la ciudad es la Casa del Gobernador, seguramente espere encontrar un gran edificio colonial de dimensiones importantes. La sorpresa siempre es mayúscula cuando se topa, confundido, con una plaza en la que solo hay unos pocos cimientos. Como tantos otros edificios antiguos, la Casa del Gobernador también sufrió un grave deterioro en los siglos pasados. Se decidió no reconstruirla, pero mantener sus cimientos, y en su ubicación colocar una plaza que pudiera ser visitada. Es, sin lugar a dudas, uno de los lugares más curiosos y pintorescos de todo Colonia de Sacramento, sobre todo por el escenario que lo rodea, con jardines, plazas y edificios coloniales.